Este fin de semana se ha estrenado en cines una de las películas del año, llamada a estar muy presente en la próxima gala de los Premios Goya. Después de triunfar en el Festival de San Sebastián, la directora Alauda Ruiz de Azúa ha presentado en cines ‘Los domingos’, una película que mezcla un drama familiar con la búsqueda de la llamada divina. Adolescencia, familia y espiritualidad, una mezcla explosiva que la directora narra con delicadeza bajo una impecable banda sonora. Eso sí, dejando al descubierto las influencias que pueden llegar a tener las manos de la Iglesia en situaciones como las que se describen en la cinta.

La joven actriz de 17 años Blanca Soroa, que ha irrumpido con fuerza en el panorama cinematográfico español, interpreta a Ainara, una brillante adolescente de 17 años que mientras medita qué carrera universitaria podría estar después del bachiller, comienza a plantearse que igual Dios le está llamando para dedicar su vida a la oración como monja de clausura. Su familia, que sobrevive recuperándose de heridas y fracturas del pasado, no sabe cómo afrontar la decisión de la joven.

En mitad del caos emocional, la película presenta al espectador las diferentes posturas que cada integrante de la familia toma ante la situación para que sea el propio espectador quien decida en cada momento con quién empatizar y con quién discrepar. La película, que aparenta transcurrir con la paz armónica de un coro de Iglesia cuando es Ainara la que debe dar sus propios pasos, se agita cuando la actriz Patricia López Arnaiz, que interpreta a la tía de la joven, entra en juego para poner las cartas sobre la mesa.

Una película que merece la pena ver en la gran pantalla con la mente libre de prejuicios y dejarse llevar por el guion. El debate está servido cuando aparezcan los créditos finales.